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Desde la Autoconvocatoria por la Suspensión del Pago e Investigación de la Deuda, repudiamos la violenta represión desatada ayer por el desmedido operativo contra una movilización popular en defensa de los derechos de los pueblos y de la naturaleza. Con el saldo de un centenar de personas heridas con los gases tirados, 6 personas detenidas frente al Congreso y otras 2 en Mendoza, todas sin motivo más que amedrentar.
Repudiamos el hecho de que el gobierno corta el suministro de alimentos a los comedores populares que cada día reciben más gente pero con las ollas vacías, mientras gasta millones de pesos para reprimir a quienes solo exigen que no se venda la Nación y que se cumpla con el derecho del pueblo a comer, al agua limpia, a trabajo, salarios y jubilaciones dignas, a la salud, la educación, la cultura...
Denunciamos nuevamente que plata hay, que el problema es que la llevan cada vez menos empresas y empresarios, tanto locales como sus patrones internacionales. Los mismos que continúan azuzando el Ejecutivo y el Congreso, buscando se amplíe su “libertad” para explotar, endeudar y saquear el país en abierta violación de la Constitución y de todos nuestros derechos como personas, como pueblos y como naturaleza.
Plata hay, y, como también vimos ayer, lo siguen destinando a pagar deudas ilegítimas y odiosas. Mientras el gobierno festejó el acuerdo con el Fondo para el desembolso de un nuevo préstamo de U$S 4.700 millones que ni siquiera cubrirán los pagos de la estafa del mismo FMI hasta abril, se intenta invisibilizar los estragos que sus condiciones ya están provocando para la gran mayoría de la población, incluyendo el mega ajuste que recién empieza a despuntarse.
Hoy volvemos a las calles junto con una gran diversidad de movimientos y organizaciones populares, para continuar exigiendo al Congreso la anulación del DNU 70/23 y el rechazo por completo del proyecto de Ley ómnibus y del Protocolo Bullrich.
Como expresamos en la Carta abierta entregada a lxs diputadxs y senadorxs, con el apoyo de más de 2000 organizaciones y referentes populares, el gobierno de Milei parte de un diagnóstico gravemente errado de las crisis que enfrentamos, para impulsar políticas que invariablemente han empeorado el día a día de las grandes mayorías. Entre ellas la delegación de facultades que busca para endeudarnos sin control alguno de parte del Congreso, la entrega y privatización del Fondo de Garantía de Sustentabilidad de lxs jubiladxs, el Banco de la Nación y cuánto patrimonio público aún nos queda.
¡NO es NO!
¡Abajo el DNU, el Proyecto Ómnibus y el Protocolo represivo!
¡Fuera FMI!
¡La Deuda es con los Pueblos y la Naturaleza!
AUTOCONVOCATORIA POR LA SUSPENSIÓN DEL PAGO E INVESTIÓN DE LA DEUDA
-BS. AS., 1/2/24
